Llega sin avisar, sin anunciar. Donde antes no había nada, una carpa de rayas se ilumina con la puesta de sol alumbrando la noche. Hechizo compuesto por artistas, músicos, acróbatas que, como nómadas, peregrinan de ciudad en ciudad compartiendo sus sueños de ambición, esfuerzo, superación, riesgo, desafío.
Romance de luz y oscuridad. Música, pintura, color, teatro.
Volantes, blondas, rayas en tafetán de seda, camisas globo y corsés inspirados en finales del s.XIX. Tocados arriesgados, creados artesanalmente, junto a bordados de cristal en negro azabache evocando la magia, que nos transportan entre bastidores de ese ambicioso universo.